En ocasiones, la naturaleza puede ser muy cruel.
Hace algunos meses, en el zoológico de Pittsburgh nació una elefanta prematura que fue rechazada por su madre, sin razón aparente.
Su madre se negó a proporcionarle alimento, así que su cría corría el riesgo de morir desnutrida.
Los funcionarios del zoológico intentaron alimentar a la pobre elefanta lo más posible, dándole leche de otra elefanta mamá para nutrirla.
Hicieron esto con la intención de que creciera y superara el trauma de su nacimiento.
Sin embargo, su condición hizo que no desarrollara colmillos, además de que se negaba a comer.
Lamentablemente, el zoológico tomó la decisión de sacrificarla antes de que muriera desnutrida.
El elefante africano, en peligro de extinción. Cada año se abate ilegalmente a unos 25.000 elefantes para conseguir el marfil de sus colmillos. El número de ejemplares victima de la caza furtiva creció tanto que en los últimos años que en 2010 superó la tasa reproductiva de la especie.