Un estudio revela que el aire acondicionado en el lugar de trabajo está programado exclusivamente para los hombres.
Podría decirse que las mujeres son víctimas de una ?discriminación climática? dentro del ambiente laboral, situación por la que suelen tiritar en sus escritorios. Esto sucede porque en la mayoría de los edificios de oficinas, los aparatos de aire acondicionado se ajustan a las necesidades fisiológicas de los hombres.
Según un nuevo estudio publicado en la revista Nature Climate Change, los espacios laborales fijan sus termostatos en verano basándose en los valores metabólicos de un varón de 40 años y 70 kg de peso. Sin embargo, la investigación revela que la mujer necesita temperaturas más altas para realizar sus actividades del día a día.
Boris Kingma y Wouter van Marken Lichtenbelt, autores del estudio, afirman que las mujeres tienden a sentir más frío en las mismas condiciones. El par declaró también que los hombres prefieren trabajar a unos 22 °C, mientras que nosotras nos sentimos más cómodas con tres grados más (25ºC). Esta investigación recuerda que este estándar de temperatura se basó en un análisis realizado en los años 60 por el danés Ole Fanger.
A pesar de saberse estos datos, las incesantes peleas por el control del aire acondicionado continúan. ?Creo que la solución es tener más compartimentos en las oficinas, hacer más flexibles las condiciones térmicas para las necesidades de cada uno, ya sea hombre o mujer", apunta Kingma.
Los investigadores agregan que los empleados ?congelados? son menos productivos. ?La comodidad climática, tanto en mujeres como hombres, puede mejorar el rendimiento?.
¿Tú padeces frío en tu oficina?