El festival internacional de cortometrajes de moda llega a México y nos encargamos de revelar las claves que te convertirán en su próxima gran luminaria.
El concepto de ?fashion film? no es nuevo en absoluto. ¿Cómo olvidar clásicos como Qui êtes-vous, Polly Maggoo? (1966) de William Klein o Puzzle of a Downfall Child (1970) de Jerry Schatzberg? Sin embargo, el término sería acuñado más tarde, englobando a todas aquellas cintas relacionadas en mayor o menor medida con el mundo de la moda. Por muchos años este subgénero permaneció borroso y en busca de identidad, con ejemplos esporádicos que distan de lo que hoy reconocemos como tal. Realmente se trataba de largometrajes tradicionales con una tendencia a destacar la participación de algún icono de la industria o cuya trama giraba en torno al glamouroso sistema de tendencias. El boom actual de los ?fashion films? y el establecimiento de una definición más precisa surgió a la par del auge de las redes sociales y plataformas de video online como YouTube, puesto que las marcas de moda descubrieron en estas ventanas de difusión un alcance jamás imaginado. Pronto, las campañas publicitarias fueron trasladadas a la red y el presupuesto anteriormente destinado a espacios televisivos fue invertido en el producto en sí, involucrando nombres de prestigio con mayor regularidad como David Lynch para Gucci, Sofia Coppola para Miss Dior Chérie o Martin Scorsese para Chanel Bleu. De igual forma se abrió una brecha para la experimentación artística: todos quedamos cautivados con el universo onírico propuesto por Mike Figgis en la serie de cortometrajes The Four Dreams of Miss X (2007) para Agent Provocateur, donde una adormilada Kate Moss nos guiaba a través de sus sueños más bizarros, en una atmósfera llena de misterio y confusión. Más tarde, el káiser Karl Lagerfeld tomaría la cámara para deleitarnos con filmes como Remember Now (2010), The Tale Of A Fairy (2011) o The Return (2013), mientras que el también considerado ?fashion film? First Kiss (2014) de Tatia Pilieva se convertiría en un éxito viral, obteniendo un aproximado de 81,884,229 visitas. La evolución de este fenómeno ha sido meteórica en la última década, pero sería un sacrilegio atribuirla a un millón de causas sin antes pensar en la figura capital del ?fashion film? contemporáneo: Diane Pernet.
Con su peinado trademark estilo ?pompadour? adornado con una mantilla negra símbolo de luto desde que perdió en un accidente automovilístico a su primer marido Norman y esas fabulosas gafas oscuras, la excéntrica diseñadora de vestuario y uno de los personajes más emblemáticos de la moda actual, decidió abandonar el atelier para dar paso a una fructífera carrera como periodista, editora, blogger y curadora del primer festival internacional dedicado a la promoción y exhibición de ?fashion films?, así como el descubrimiento de nuevos talentos de esta incipiente disciplina. La aventura comenzó en 2006 con el lanzamiento de ?You Wear It Well?, una breve muestra dedicada a cortometrajes de moda llevada a cabo en el complejo Cine Space de Los Ángeles. Dos años después y aprovechando la popularidad de su blog de moda A Shaded View On Fashion, decidió fundar y presidir A Shaded View On Fashion Film, cuya convocatoria ha logrado reunir a las más inalcanzables personalidades del medio: Bruce Weber, Tilda Swinton, Steven Klein, Chris Cunningham, Inez & Vinoodh, Ellen Von Unwerth, Rossy de Palma, Nick Knight, Daphne Guinness, Anna Dello Russo, Faye Dunaway, Jim Jarmusch, Charlize Theron, Chloë Sevigny, Lara Stone, Drew Barrymore y Ryan McGinley; quienes al cabo de seis ediciones se han dado cita en el Centre Georges Pompidou de París para galardonar a los mejores exponentes del ?fashion film? antes de que estos emprendan una gira mundial y sean presentados en eventos como el Festival de cine de Cannes y Art Basel Miami. El sueño absoluto de cualquier cineasta.
Durante el pasado mes de abril, la industria de la moda nacional se conmocionó con la noticia de que ASVOFF abriría sus inscripciones para el público mexicano, como parte de un mini festival dispuesto a celebrarse del 6 al 8 de noviembre, el cual precederá a la versión oficial programada los días 21, 22 y 23 del mismo. Los ganadores del Grand Prix en nuestro país, tanto en las categorías amateur como profesional, recibirán acceso directo a la gran final internacional, no sin antes pasar por el estricto filtro de Diane Pernet, así como el de un jurado conformado por importantes pilares de la moda, el cine, el arte, el diseño y el medio editorial.
La pregunta del millón sería: ¿por qué México? y la respuesta nos remite nada más y nada menos que a la ex modelo y actriz Luisa Sáenz, responsable de importar ASVOFF y fungir como mente maestra de este proyecto. En una plática íntima con ella y también con la propia mademoiselle Pernet, analizamos el papel del ?fashion film? en el mundo actual.
El eterno debate de la moda como forma artística surgió naturalmente, y es que tal vez un festival como ASVOFF podría dotar de un valor superior a esta rama creativa, subestimada en ocasiones por la superficialidad de la industria que la rodea: ?La moda no forma parte de las bellas artes?, afirmó Diane, ?como máximo es un arte aplicado, lo que significa que es una actividad comercial. Sin embargo, sí refleja el mundo de hoy, aunque lo hace a través de los filtros de la fantasía y el escape?. Pero, ¿qué hay entonces del movimiento, las siluetas y el universo estético que transmite la moda por medio de un vehículo como el séptimo arte? ?Yo creo que para los diseñadores es mucho más fácil expresar su esencia a través del ?fashion film??, complementó Luisa. Esto nos hace pensar incluso en talentos mexicanos como Lorena Saravia, quien ha saltado a la ola de los cortometrajes de moda para promocionar sus últimas colecciones. ?Este formato abrió la puerta para que las pequeñas y medianas marcas hicieran comerciales de video por primera vez?, explicó Diane, ?antes de que la tecnología se desarrollara al punto de permitir que el ?fashion film? floreciera, sólo los nombres más poderosos tenían suficiente capital como para promoverse en televisión y el cine, pues las tarifas eran muy altas?. Se trata, por ende, de una consecuencia más de Internet, el gran democratizador de las comunicaciones. ?Hoy día, los ?fashion films? son muy accesibles desde los propios websites de las marcas y su financiamiento es mucho más sencillo que el de los típicos comerciales?.
Por su parte, Luisa destacó las ventajas de los dispositivos de última generación: ?Gracias a las tablets y a los teléfonos inteligentes estamos cambiando el lenguaje de la cinematografía. Ahora puedes hacer un ?fashion film? con ángulos muy diferentes a los que te permite una cámara de cine por su tamaño, peso y falta de movilidad?. En la cultura mediática de hoy, este formato que es más espontáneo y menos dependiente de un guión, puede ser muy atractivo para los consumidores, pues su espíritu consiste en empujar los límites un poco más y no necesariamente presentar algo impecable. Así, mientras los mejores directores lo están llevando a los niveles más pulidos y sofisticados, otros están regresando a estilos más experimentales, crudos e, incluso, de menor resolución. Pero, pensando particularmente en ASVOFF, ¿qué pesará más, la narración o la calidad estética? ?El contenido es mucho más importante que la ejecución, pero los dos tienen relevancia?, enunció Diane, ?lo que yo aprecio más es el punto de vista narrativo de directores reales y no sólo fotógrafos de moda proponiendo editoriales en movimiento?. Luisa estuvo completamente de acuerdo con su mentora: ?No queremos a la chica guapa mostrando la prenda, queremos una historia?. Como ejemplos de ?fashion films? que han logrado un balance perfecto entre estos elementos, ambas destacaron Therapy (2012) de Roman Polanski para Prada y She Said She Said (2013) de Stuart Blumberg con Marisa Tomei.
En cuanto a la presencia del festival en nuestro país, cabe mencionar que durante 2009 y 2010 fue proyectada una selección de ?Lo mejor de ASVOFF? con gran éxito. Este año, la iniciativa tomará una nueva dimensión para que nuestros talentos reciban reconocimiento en el extranjero. ?México tiene una gran historia de cine y es el lugar donde logramos congregar a 2017 personas hambrientas de cultura en una sola proyección?, comentó orgullosa Diane Pernet, ?sabía instintivamente que un festival de ?fashion films? llenaría un importante vacío creativo. Supongo que entendí que existía una audiencia esperando ser atendida?.
Y así fue, pero es entonces cuando surgen las dudas con respecto al alcance del ?fashion film? y su futuro más allá de la industria de la moda, ¿se trata de una tendencia de nicho o podrá imponerse como una disciplina y género formal de la cinematografía? ?El ?fashion film? ha logrado pasar de la libre experimentación a una forma artística por derecho propio y una valiosa ventana comercial?, aseguró la creadora de ASVOFF, ?llegó para quedarse y profesionalizarse más?.