La ‘Chica Dorada’ emprenderá un viaje por tren para desentenderse de los múltiples conflictos y rumores que han surgido sobre ella.
Paulina Rubio ha vuelto a demostrar que se mantiene fiel a su estrategia de aislarse del ojo público cada vez que su figura se ve asociada a cualquier tipo de escándalo, ya que solo un día después de que fuera acusada de agredir físicamente a Nicolás Vallejo-Nágera durante los años de su conflictivo matrimonio, la artista ha anunciado ante sus seguidores que ha decidido "alejarse de la civilización" en un viaje en tren del que no ha dado muchos detalles.
"Se acabó, me alejo de la civilización en tren y viajo directamente al universo de la música", menciona el mensaje que publicó en su cuenta de Twitter, junto a una imagen en la que posa relajada en el vagón mientras lee una revista.
Aunque su decisión de hacer las maletas y lanzarse de lleno a recorrer el mundo probablemente se explique con los preparativos de su nuevo trabajo discográfico, la artista debería aprovechar su viaje para preparar la respuesta al conflicto judicial que recibió ayer en un tribunal de Miami, cuando la niñera Ivette Ramírez -encargada de cuidar del pequeño Andrea Nicolás en sus primeros meses de vida- aseguró haber sido testigo de desagradables discusiones entre Paulina y ‘Colate’ que, con frecuencia, derivaban en varios golpes propinados por la artista a su ya ex marido.
Además de ofrecer su testimonio personal sobre la difícil vida matrimonial de Paulina y Colate, la mencionada niñera solicitó al magistrado de que se sometiera al hijo de la pareja a un examen psicológico lo antes posible, con el objetivo de determinar si la agria disputa entre sus padres podría haberle dejado algún tipo de secuela emocional.