A pesar de que aparece en uno de los programas más vistos del mundo, la actriz piensa que su apariencia aún es un reto para conseguir papeles.
El primer papel a nivel profesional de Maisie Williams fue como Arya Stark en Game of Thrones, un trabajo que, aunque le ha dado gran fama y reconocimientos, podría no ser garantía de que en el futuro obtenga papeles similares.
¿La razón? La misma actriz reveló que su apariencia podría impactar el desarrollo de su carrera.
?Es hasta ahora que me doy cuenta de los papeles que puedo obtener debido a la manera en que luzco y a los personajes a los que no puedo aspirar?, dijo a The Irish Times.
?Es una industria muy superficial y no luzco como alguien que contratan para papeles que son, bueno, sensuales. No me malinterpreten. Estoy completamente a favor de las chicas protagonistas, me encanta ver a todas esas mujeres hermosas. Pero creo que es triste que sólo puedas ver un tipo de belleza en la pantalla?.
Y es que, a pesar de que se han hecho enormes avances para incluir a distintos tipos de belleza en el cine y la televisión, aún predominan las mujeres rubias, delgadas, estilizadas y más.
¿Hasta cuando podremos olvidar este tipo de prejuicios?
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