La actriz escribió un poderoso ensayo en el cual relata lo escalofriante que fue su situación con el productor cuando apenas comenzaba su carrera.
La actriz Lupita Nyong’o ha sido la última en compartir el acoso sexual del productor de cine Harvey Weinstein a través de un ensayo publicado en el periódico The New York Times, en el cual describe su relación con el cineasta de 65 años de edad.
El artículo describe cómo es que la actriz keniana-mexicana conoció a Weinstein mientras estudiaba artes dramáticas. Ahí detalla distintos incidentes que reflejan muchas de las acusaciones que se han hecho en contra de él, desde invitarla a ver películas con su familia (y sus hijos presentes) hasta llevarla a otro cuarto, pidiéndole que le diera un masaje y desvistiéndose.
Ella escribió:
"Harvey me llevó a un dormitorio- el suyo- y anunció que quería darme un masaje. Pensé que estaba bromeando al principio. No lo estaba. Por primera vez desde que lo conocí, me sentí insegura. Me asusté un poco y pensé que era mejor darle uno: me ayudaría a tener el control de la situación y saber dónde estaban sus manos exactamente en cada momento. Aceptó y se acostó sobre la cama. Comencé a masajearlo para ganar tiempo y decidir cómo salirme de esta indeseable situación. Al poco tiempo dijo que quería quitarse los pantalones. Le dije que no y que me incomodaría mucho. Igual se levantó para hacerlo y yo me acerqué a la puerta, diciendo que no estaba cómoda con eso. ‘Si no vamos a ver la película, debería regresar a la escuela’, dije."
Como muchas otras de las víctimas, ella no le dijo nada durante el incidente, consciente de su poder y pensando lo mejor de él y pensando que ella malinterpretó la situación.
"Acepté con una risa incómoda, tratando de salir ilesa de la situación. Estaba consciente de que estaba en su casa, con su familia, los testigos potenciales, estaban todos en una habitación a prueba de sonidos", continúo.
El artículo escrito por la actriz de "12 años esclavo" ha sido aplaudido por contar abiertamente cómo es que una actriz joven continuaría siendo amigable con Weinstein luego de este tipo de situaciones. Ella explica que el razonamiento detrás es que frente al público, los encuentros eran encantadores.
"No sabía exactamente como procesar la situación. Entendí que había sido inapropiado y no requerido, pero no demasiado sexual. Estaba entrando a una industria donde lo íntimo tiene mucho que ver con lo profesional, así que las líneas no son claras", escribe.
Sin embargo, también relata que el productor continuó invitándola a salir a cenar y sugiriéndole que durmiera con él por papeles, diciendo que otras actrices lo habían hecho.
A partir de entonces, Lupita decidió no trabajar con él nunca, a pesar de su insistencia, y no lo ha hecho.
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