Según un estudio realizado en EE. UU., el mal humor se contagia como una gripe grave en invierno.
Al igual que usted no elige a su familia, tampoco elige a sus colegas.
El ambiente de alto estrés y el tiempo que pasa con sus compañeros son dos factores agravantes que hacen de su lugar de trabajo un buen lugar para esta enfermedad.
Según los investigadores de los EE. UU., una sola mala interacción con uno de sus colegas podría tener repercusiones negativas durante una semana entera.
De ahí la importancia de ser amable con los colegas. ¡Más vale prevenir que curar!
Afortunadamente, el mal humor, aunque es contagioso, no es una enfermedad irreversible.
Para deshacerse de él, rodéese de personas positivas con las que pueda tener una relación sana y positiva.
Antes o después de cada comida, duerma bien por la noche y comparta con sus colegas favoritos historias divertidas. Finalmente, huya de cualquier persona que pueda considerar tóxica.
En cambio, el estudio encontró que tener un amigo feliz aumentar nuestro sentimiento de felicidad.
¿La felicidad sería también una enfermedad contagiosa? En todos los casos, por lo que asegúrese de elegir a sus amigos, que podrían llegar a ser la cura milagrosa en caso de epidemia en general en el trabajo.
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