A continuación te damos ocho tips para que logres salir de la cama por las mañanas para hacer ejercicio…
Uno de los mejores hábitos que puedes adquirir para tu salud es hacer ejercicio, pues además de la obviedad de que te mantendrá saludable -e incluso con un esfuerzo extra lograrás un cuerpo de envidia- la actividad física te hará sentir satisfecho, pensar con más claridad y mantenerte feliz, ya que tu cuerpo producirá endorfinas de manera natural, lo que además genera una sensación de bienestar.
Dicen que el mejor momento para hacer ejercicio es por las mañanas, pues es cuando se queman más calorías. Cuanto más temprano activas tu cuerpo, más velozmente funciona tu metabolismo. Esto significa, que si te ejercitas por la mañana, quemarás calorías durante todo el día. También mejorarás tu agudeza mental, y con esto potenciarás su actividad el resto del día.
Pero el asunto no es que no quieras hacerlo, a veces el problema está en poder salir de la cama. Es por ello que te damos ocho tips para que sea menos difícil y logres ser más saludable:
1. Trata de acostarte temprano. Si duermes lo suficiente (entre 7 y 9 horas) y estás descansado, tendrás la energía necesaria para ejercitarte y sobrevivir el resto del día sin problemas.
2. Prepara tus tenis, outfit deportivo y botella de agua la noche antes. Deja también lista la comida, o ropa que vayas a utilizar para la oficina, los pendientes o responsabilidades cubiertas para que puedas hacer ejercicio sin preocupaciones ni prisa.
3. Pon dos alarmas, y convéncete de que sí puedes salir de la cama. Aleja el teléfono o reloj para que tengas que levantarte a apagarla.
4. Elige el ejercicio que más te guste, el que no te aburra. Si estar en la caminadora se vuelve insoportable a los 10 minutos y empiezas a desesperarte, métete a clases. Así te obligarás a permanecer toda la sesión. Si no eres una ?persona de mañana?, puedes empezar haciendo cosas más tranquilas, como dando un paseo alrededor de la cuadra. Puedes ir adquiriendo la rutina poco a poco sin que sea un martirio.
5. Una buena playlist puede hacer toda la diferencia. Invierte unas horas en hacer una lista con tus canciones favoritas.
6. Busca compañía. Si tienes el compromiso con un amigo o compañero de hacer ejercicio cada mañana, será más difícil que abandones la rutina.
7. Recompénsate. Cuando te acuestes piensa en esa deliciosa taza de café que acompañará tus primeros pensamientos, o el jugo de fruta fresco con el que te hidratarás después del ejercicio. O si cumples tus metas, semana tras semana, recompénsate con algo de ropa que le hayas puesto el ojo.
8. Cada noche recuerda lo bien que te sentiste después de haber hecho ejercicio, esa será la mejor manera de seguir repitiéndolo.
Crédito de fotos: Getty Images
Con información de HuffingtonPost